Tiene mas de 26 mil kilómetros recorridos sobre su silla de ruedas y 12 mas a nado y aunque ha logrado atraer la atención de mucha gente, Mario Dávalos Romero aún se propone derribar el muro de la indiferencia y la irresponsabilidad de algunas autoridades que no incluyen en sus programas atención al sector de discapacitados; de algunos ciudadanos que aún conociendo los señalamientos omiten respetarlos y de algunos constructores que olvidan hacer accesibles para los minusválidos, las obras que diseñan.
En su record, Dávalos Romero de 42 años de edad y originario de Xalapa en el estado de Veracruz no incluye las distancias que debe recorrer cuando algún irresponsable lo hace ir de una dependencia a otra en busca de ayuda. Y es que desde el pasado 10 de octubre del 2009, Mario emprendió un recorrido sobre su silla de ruedas hacia Cancún Quintana Roo y luego de regreso a su lugar de origen para terminar el próximo 25 de febrero según sus estimaciones. En este recorrido que tiene como propósito, insiste “en elevar a conciencia de todas aquellas personas, sean autoridades, constructores, diputados y ciudadanía en general, para que sigan colaborando en el desarrollo pleno de la comunidad discapacitada”.
Mario Dávalos fue víctima de las secuelas de poliomielitis a los tres meses de nacido y desde entonces ha tenido que valerse de su silla de ruedas para continuar adelante con su vida. Lleva 9 recorridos similares al que está en curso; en el puerto de Veracruz, nadó 12 kilómetros en mar abierto y ha ganado más de 100 medallas en diversas competiciones locales en su natal estado, nacionales e internacionales.
Con su actitud Mario quiere demostrar que cuando una persona se propone cumplir una meta y emplea en ello todos sus sentidos, siempre la habrá de cumplir. En el caso del sector poblacional con alguna discapacidad, indudablemente que requiere de ayuda institucional para conseguir que la vida de estas personas se desarrolle lo mejor posible.
De innegable espíritu aventurero Mario Dávalos Romero eligió dar la pelea a bordo de su silla de ruedas, provisto de un escaso equipaje y así conoce casi toda la república. En sus trayectos ha tenido accidentes y pequeños inconvenientes, pero al final del día se quedan en eso: en pequeñeces que no detendrán la marcha de Dávalos en busca de equidad y atención para la población minusválida.
En su record, Dávalos Romero de 42 años de edad y originario de Xalapa en el estado de Veracruz no incluye las distancias que debe recorrer cuando algún irresponsable lo hace ir de una dependencia a otra en busca de ayuda. Y es que desde el pasado 10 de octubre del 2009, Mario emprendió un recorrido sobre su silla de ruedas hacia Cancún Quintana Roo y luego de regreso a su lugar de origen para terminar el próximo 25 de febrero según sus estimaciones. En este recorrido que tiene como propósito, insiste “en elevar a conciencia de todas aquellas personas, sean autoridades, constructores, diputados y ciudadanía en general, para que sigan colaborando en el desarrollo pleno de la comunidad discapacitada”.
Mario Dávalos fue víctima de las secuelas de poliomielitis a los tres meses de nacido y desde entonces ha tenido que valerse de su silla de ruedas para continuar adelante con su vida. Lleva 9 recorridos similares al que está en curso; en el puerto de Veracruz, nadó 12 kilómetros en mar abierto y ha ganado más de 100 medallas en diversas competiciones locales en su natal estado, nacionales e internacionales.
Con su actitud Mario quiere demostrar que cuando una persona se propone cumplir una meta y emplea en ello todos sus sentidos, siempre la habrá de cumplir. En el caso del sector poblacional con alguna discapacidad, indudablemente que requiere de ayuda institucional para conseguir que la vida de estas personas se desarrolle lo mejor posible.
De innegable espíritu aventurero Mario Dávalos Romero eligió dar la pelea a bordo de su silla de ruedas, provisto de un escaso equipaje y así conoce casi toda la república. En sus trayectos ha tenido accidentes y pequeños inconvenientes, pero al final del día se quedan en eso: en pequeñeces que no detendrán la marcha de Dávalos en busca de equidad y atención para la población minusválida.
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