EJIDATARIOS RECUPERAN PREDIO INVADIDO EN EL C -09

En base a una resolución del Tribunal Agrario, personal de esta dependencia encabezado por un actuario y acompañado de ejidatarios del Poblado Francisco I. Madero (C-09) del Plan Chontalpa, mediante un operativo recuperaron cerca de 100 hectáreas de terrenos ejidales que un grupo de 30 personas habían invadido desde hace treinta años.
La presencia mayoritaria de ejidatarios y de la policía municipal por ratos provocó tensión entre los propios campesinos, que reclamaban a su dirigente Juan Jiménez Córdova (a) Pata de palo, mayor contundencia para hacer que se cumpliera la resolución del tribunal, desalojando no solo los predios en cuestión sino un grupo de al menos ocho viviendas, donde habitan los supuestos invasores.
Ante el repliegue del dirigente campesino Juan Jiménez Córdova y la falta de autoridad del comisario ejidal Belisario Ortiz (a) El Chulo, solo fue posible que los campesinos recuperaran las hectáreas invadidas pero no culminó el operativo de desalojo de las viviendas, lo cual provocó la molestia de los campesinos fundadores del ejido, quienes en compañía de sus hijos y ayudados de varios tractores agrícolas derribaron alambradas, postes y portadas de los terrenos que ya se habían repartido entre los invasores.
“Este es un problema que tiene casi 30 años en los tribunales y hoy se llevo a cabo a medias, la resolución del Tribunal Agrario, ya que estas casi 100 hectáreas pertenecen al ejido pero desde hace 30 años estaban en manos de un grupo pequeño de invasores adinerados” explicó Efraín Arévalo Leyva a nombre de los ejidatarios.
Por separado Bartolo Martínez Pérez, uno de los supuestos invasores pidió a los ejidatarios que se realizara una asamblea para determinar de qué manera podrían “arreglarse” a fin de rescatar al menos el pedazo de terreno donde están edificadas las viviendas que habitan y qué estas no fueran destruidas, ya que en ellas han invertido gran parte de sus ahorros personales, sin embargo la petición quedó en el aire y aplazada quedó la destrucción de las casitas.